martes, 8 de marzo de 2011

Love of Lesbian - La Parábola del Tonto


Ya no hay confusión
ya que el rencor duerme ahora en un desván.
Dime ...

sábado, 5 de marzo de 2011

Extraña

L'amitié après l'amour n'existe pas

Hoy me desperté cerca de mediodía, se podría decir que es prácticamente el último día en que podré disfrutar el levantarme cerca de esa hora -y realmente lo disfrute-. Desde el lunes que estoy sin pega en la clínica y me he dedicado a relajarme estos días y a estar con mi Schimmy y mi Chica.
Lo primero que hice fue llamar a mi ex para saber si me iba a poder acompañar a la fisioterapia de mi gato. Su respuesta me molesto algo, ya que nuevamente me di cuenta de que sólo ella puede contar conmigo y yo cuando necesite de alguien, la última persona con la que debería contar sería con ella. Da igual. No fue una buena forma de despertar. Fui al baño, me lave la cara, me cepille los dientes y me peine el desastre de nido de pájaros que tengo por pelo. Me hice una cola y fui a la cocina a poner el hervidor. Se venía el primer café del día. Lo serví cargado y negro. Con la taza me fui a la cama otra vez.
Prendí el televisor, dejándolo en cualquier cosa sin interés. Llamé a Daniela, una amiga que estoy conociendo hace poco, hablamos como 5 minutos y antes de terminar me dice: "algo te pasa... hoy estas como extraña"... EXTRAÑA... sí, creo que no es primera vez que me lo dicen y la verdad es que sí, me siento demasiado extraña últimamente.

No sé si me siento así por que prontamente entraré a clases y volveré a ver a mi ex todos los días -prácticamente- o por qué veré a quienes se decían amigas -y que para rematar están en la misma sección de los ramos que tomé- o por qué este año siento una presión adicional... o simplemente por qué no sé que vaya a pasar con mi gato -no sé si valdrá la pena gastar el dineral que gastaré en él... o de optar por lo sano... pero no quiero quedarme después con la sensación de que no hice nada y de "podría haber sido"...- Cuando lo pienso me doy cuenta de que son muchas razones para que una persona que estoy conociendo hace poco más de un mes me diga que me siente extraña.
Me quedé un rato pensando en Daniela. La verdad es que nos llevamos super bien, pero es raro... extraño, otra vez... cada vez que alguien logra interesarme un poco y se muestra cercana a mi o demuestra algo de preocupación, huyo lo más rápido que pueda y empiezo a tratar con puras evasivas... me escondo en la asquerosa persona que puedo llegar a ser. No es primera vez que pasa. Con Francesca pasó lo mismo -aunque nuestra relación hoy es bastante extraña-. Lo mismo pasó con Gisselle... -de ella hace mucho que no sé nada-. Es extraño. Soy extraña. 

La tarde paso y comí un trozo de melón que estaba en el refrigerador. No tenía muchas ganas de ir a ducharme aún, aunque el calor me estaba matando. Vi un par de programas, terminé de pintar mis uñas de morado. Cepille a mi gato. Cambie las sábanas de mi cama. Y cerca de las 4:30 me fui a duchar. Me encanta el agua, amo ducharme, pero odio el baño del departamento de mi mamá. 
Me vestí y fui a girar la plata para pagar la evaluación de fisioterapia de mi gato. Eran 28.000 que tendría que gastar -en un principio, ya que ahora son 160.000 por 10 sesiones-. Es todo un tema lo que se viene con mi gato, pero prefiero no pensar en nada y agotar las últimas instancias, por último si nada resulta, lo único de lo que me arrepentiré haber sido de gastar plata -que quizás en estos momentos no se de donde conseguir... pero algo se verá-. Me siento algo sola en esta batalla y siento que al fin del camino el destino será el mismo: Amputar la pata de mi gato.
Pasado las 6 me llama mi ex, le devuelvo el llamado y me dice que podrá acompañarme, que viene en camino. La verdad es que me sentí bien. No quería ir sola. No sabía a que atenerme con toda la evaluación, ya que sabía que se vería que tan probable es que recupere la movilidad. Mi mamá saldría tarde de la oficina y mis hermanos salieron, Luisa y Sergio estaban fuera de Santiago y la verdad es que cero animo de ir sola. Llegué a las 6:30 y tuve que esperar casi una hora para que me atendieran. A los minutos de haber llegado aparece mi ex. Conversamos y me aclaro que su pareja no quiere que nos juntemos nunca más. Nuevamente me sentí extraña, sigo con esa sensación que hizo que en diciembre mandáramos todo a la mierda y maldijéramos habernos conocido, siento que tengo que estar siempre que ella quiera y aguantar que me busqué cuando pelean, tener que escucharla, lamentarse, tratar de darle animo, apoyarla a que solucione sus problemas y yo me quedo en el silencio absoluto, sin nadie que escuche y me diga algo al respecto de porque soy lo extraña que soy, por qué huyo de la gente. En fin. Como dice una canción que me gusta... Yo no puedo jugar a ser Dios… Y estar cuando quieras…
Al terminar la evaluación y quedar descompensada por la cantidad de plata que aún me queda por gastar en mi gato, mi ex se fue en micro, si cruzar muchas palabras y yo me fui en taxi. Me quede con esa rara sensación de tener que estar sola... sola... sola... y de que siempre se aprovecharan de mi por que no se decir que no en muchas cosas y siempre, para todo el mundo, tengo que estar ahí... 
A la conclusión que llegué es que: L'amitié après l'amour n'existe pas



martes, 1 de marzo de 2011

Me Amo - Love of Lesbian


Mi piace andare piano, piano,
como Adriano Celentano
because like this
because like this si arriva lontano.

Cuando nací, ¡qué triunfo!,
entendí que había sido capaz de ganar
a cien millones de hombres rana en celular.
Y había nivel, y trampas.
El segundo quería estudiar alemán,
pero volcó en las caderas de mamá.

Hoy voy a decirlo: ¡cómo me amo!
Y tú ya no puedes hacerme daño.
Soy un ser divino, ven a adorarme.
¡Qué buena suerte amarme tanto!

Luego crecí, ¡qué trauma!,
percibí que aquí fuera no había piedad,
yo no iba a ser el rey del mundo.
Algo más tarde, ya un hombre,
me juré no volver a olvidarlo jamás,
fui el ganador del gran circuito de Le Mans.

Hoy voy a decirlo: ¡cómo me amo!
Y tú ya no puedes hacerme daño.
Soy un ser divino, ven a adorarme.
¡Qué buena suerte amarme tanto!

Oh, el síndrome Universal,
la vida te sentó en un diván,
contando todo tipo de traumas.
Oh, podrías pensar un rato en él,
quería estudiar, recuerda como te empujaba.
Y quedó segundo, uuuhhh ...

Hoy voy a decirlo: ¡cómo me amo!
Y tú ya no puedes hacerme daño.
Soy un ser divino, ven a adorarme.
¡Qué buena suerte amarme tanto!

Di no al pánico, sin pánico, sin pánico, no al pánico.
Edipo contra Electra,
narcisismo es lo que impera.
Qué simpático, simpático, carismático, simpático.
Edipo contra Electra,
tus complejos a la hoguera, ¡ya! 

Crónica de un Schimmy hospitalizado

Un fin de semana de trabajo. Todo parte el martes en la noche, dirigiéndome a algún metro o punto de encuentro con Sergio y Luisa para ir a su casa en Las Vizcachas y preparar las cosas para un nuevo operativo. Esta vez el destino es San Francisco de Mostazal.

Miércoles, temprano en la mañana alistamos todo en el auto y partimos. Un primer operativo de esterilización en la zona sin mayores problemas. Conocí a gente muy agradable, quienes en lo posible seguirán trabajando con nosotros. Muchos pelos, gatos, perros y una urgencia.

Jueves. Día para preparar las cosas para un "maratón" de operativos en el litoral de la V región. Una junta con mi ex para ayudar a una perris de la calle y todo sigue. Cargamos el auto y viaje a Algarrobo. Luz cortada. Refrigerador con hongos. Limpiezas hasta altas horas de la noche. A dormir. 

Viernes. Isla Negra. "Mini" operativo. Más gatos que perros. 5 de la tarde: Schimmy enfermo. 6 de la tarde: Schimmy hospitalizado. Ddx: Daño neurológico por trauma. Miedos, lágrimas, angustia, ganas infinitas de volver a Santiago y estar con él. Llamados para todas partes. Sergio y Franco. Anisocoria. Sin pulso, sin dolor en mano derecha. Más miedo. Una comida con los amigos, un maravilloso atardecer cerca de la playa, como hace mucho no disfrutaba. Casa. Cama. Angustia. Dormir. 

Sábado. El Quisco. Muchos Perros, pocos gatos. Schimmy aún hospitalizado. Más miedo, pero es otro día de trabajo. Empanada de queso. Llamadas a mi ex. Visitas de mi papá. Llamadas a Santiago. Schimmy muestra leves mejorías, comienza a comer, disminuye el nivel de la anisocoria, demuestra dolor profundo. Aún no hay pulso. Mentiras. Junta con mi ex. Playa. Arena. Risas, cigarros y cervezas. Paseos por "tontodromos" -ferias artesanales-. Colectivo. Isla Negra. Alejandro Sanz. Chuapi. Madrugada de vuelta a la casa y a dormir. 

Domingo. Algarrobo. Día nublado como mi mente. Operativo sin novedad. Schimmy aún hospitalizado, sin visita aún del neurólogo. Come sólo, hace sus necesidades sin problemas. Presencia de dolor superficial, dolor profundo. Aparece pulso. Leve tranquilidad. Verduras salteadas con papas. Paseo al centro. tour de "tontodromos". Risas, bromas, láser de 10 lucas que alumbra hasta la chucha... Casa. Sopa. Lágrimas, angustia y dormir. 

Lunes. 12hr: Viaje de vuelta a Santiago. Llamada a Santiago. Finalmente lo verá el neurólogo.  Parada Maipú. Ducha, almuerzo, colectivo, hospital veterinario. 17:45: Schimmy se va de alta. Corticoides, Citoneuron. Nervio radial comprometido. Terapia física. A la casa. Trato de conservarme entera, pero no es mi mismo gato. Tengo angustia, pena. Me siento descolocada con todo lo que paso. Miedos. Muchos miedos.

Debo confesar que mi gato ya no es el mismo, sigue siendo el regalón de siempre. Come como cerdito. Toma demasiada agua -por los corticoides-. Pero en el fondo siento una pena enorme por él. Su vida cambio para siempre. Y me siento mal de no haber estado con él... 

Sólo eso.

martes, 8 de marzo de 2011

Love of Lesbian - La Parábola del Tonto


Ya no hay confusión
ya que el rencor duerme ahora en un desván.
Dime ...

sábado, 5 de marzo de 2011

Extraña

L'amitié après l'amour n'existe pas

Hoy me desperté cerca de mediodía, se podría decir que es prácticamente el último día en que podré disfrutar el levantarme cerca de esa hora -y realmente lo disfrute-. Desde el lunes que estoy sin pega en la clínica y me he dedicado a relajarme estos días y a estar con mi Schimmy y mi Chica.
Lo primero que hice fue llamar a mi ex para saber si me iba a poder acompañar a la fisioterapia de mi gato. Su respuesta me molesto algo, ya que nuevamente me di cuenta de que sólo ella puede contar conmigo y yo cuando necesite de alguien, la última persona con la que debería contar sería con ella. Da igual. No fue una buena forma de despertar. Fui al baño, me lave la cara, me cepille los dientes y me peine el desastre de nido de pájaros que tengo por pelo. Me hice una cola y fui a la cocina a poner el hervidor. Se venía el primer café del día. Lo serví cargado y negro. Con la taza me fui a la cama otra vez.
Prendí el televisor, dejándolo en cualquier cosa sin interés. Llamé a Daniela, una amiga que estoy conociendo hace poco, hablamos como 5 minutos y antes de terminar me dice: "algo te pasa... hoy estas como extraña"... EXTRAÑA... sí, creo que no es primera vez que me lo dicen y la verdad es que sí, me siento demasiado extraña últimamente.

No sé si me siento así por que prontamente entraré a clases y volveré a ver a mi ex todos los días -prácticamente- o por qué veré a quienes se decían amigas -y que para rematar están en la misma sección de los ramos que tomé- o por qué este año siento una presión adicional... o simplemente por qué no sé que vaya a pasar con mi gato -no sé si valdrá la pena gastar el dineral que gastaré en él... o de optar por lo sano... pero no quiero quedarme después con la sensación de que no hice nada y de "podría haber sido"...- Cuando lo pienso me doy cuenta de que son muchas razones para que una persona que estoy conociendo hace poco más de un mes me diga que me siente extraña.
Me quedé un rato pensando en Daniela. La verdad es que nos llevamos super bien, pero es raro... extraño, otra vez... cada vez que alguien logra interesarme un poco y se muestra cercana a mi o demuestra algo de preocupación, huyo lo más rápido que pueda y empiezo a tratar con puras evasivas... me escondo en la asquerosa persona que puedo llegar a ser. No es primera vez que pasa. Con Francesca pasó lo mismo -aunque nuestra relación hoy es bastante extraña-. Lo mismo pasó con Gisselle... -de ella hace mucho que no sé nada-. Es extraño. Soy extraña. 

La tarde paso y comí un trozo de melón que estaba en el refrigerador. No tenía muchas ganas de ir a ducharme aún, aunque el calor me estaba matando. Vi un par de programas, terminé de pintar mis uñas de morado. Cepille a mi gato. Cambie las sábanas de mi cama. Y cerca de las 4:30 me fui a duchar. Me encanta el agua, amo ducharme, pero odio el baño del departamento de mi mamá. 
Me vestí y fui a girar la plata para pagar la evaluación de fisioterapia de mi gato. Eran 28.000 que tendría que gastar -en un principio, ya que ahora son 160.000 por 10 sesiones-. Es todo un tema lo que se viene con mi gato, pero prefiero no pensar en nada y agotar las últimas instancias, por último si nada resulta, lo único de lo que me arrepentiré haber sido de gastar plata -que quizás en estos momentos no se de donde conseguir... pero algo se verá-. Me siento algo sola en esta batalla y siento que al fin del camino el destino será el mismo: Amputar la pata de mi gato.
Pasado las 6 me llama mi ex, le devuelvo el llamado y me dice que podrá acompañarme, que viene en camino. La verdad es que me sentí bien. No quería ir sola. No sabía a que atenerme con toda la evaluación, ya que sabía que se vería que tan probable es que recupere la movilidad. Mi mamá saldría tarde de la oficina y mis hermanos salieron, Luisa y Sergio estaban fuera de Santiago y la verdad es que cero animo de ir sola. Llegué a las 6:30 y tuve que esperar casi una hora para que me atendieran. A los minutos de haber llegado aparece mi ex. Conversamos y me aclaro que su pareja no quiere que nos juntemos nunca más. Nuevamente me sentí extraña, sigo con esa sensación que hizo que en diciembre mandáramos todo a la mierda y maldijéramos habernos conocido, siento que tengo que estar siempre que ella quiera y aguantar que me busqué cuando pelean, tener que escucharla, lamentarse, tratar de darle animo, apoyarla a que solucione sus problemas y yo me quedo en el silencio absoluto, sin nadie que escuche y me diga algo al respecto de porque soy lo extraña que soy, por qué huyo de la gente. En fin. Como dice una canción que me gusta... Yo no puedo jugar a ser Dios… Y estar cuando quieras…
Al terminar la evaluación y quedar descompensada por la cantidad de plata que aún me queda por gastar en mi gato, mi ex se fue en micro, si cruzar muchas palabras y yo me fui en taxi. Me quede con esa rara sensación de tener que estar sola... sola... sola... y de que siempre se aprovecharan de mi por que no se decir que no en muchas cosas y siempre, para todo el mundo, tengo que estar ahí... 
A la conclusión que llegué es que: L'amitié après l'amour n'existe pas



martes, 1 de marzo de 2011

Me Amo - Love of Lesbian


Mi piace andare piano, piano,
como Adriano Celentano
because like this
because like this si arriva lontano.

Cuando nací, ¡qué triunfo!,
entendí que había sido capaz de ganar
a cien millones de hombres rana en celular.
Y había nivel, y trampas.
El segundo quería estudiar alemán,
pero volcó en las caderas de mamá.

Hoy voy a decirlo: ¡cómo me amo!
Y tú ya no puedes hacerme daño.
Soy un ser divino, ven a adorarme.
¡Qué buena suerte amarme tanto!

Luego crecí, ¡qué trauma!,
percibí que aquí fuera no había piedad,
yo no iba a ser el rey del mundo.
Algo más tarde, ya un hombre,
me juré no volver a olvidarlo jamás,
fui el ganador del gran circuito de Le Mans.

Hoy voy a decirlo: ¡cómo me amo!
Y tú ya no puedes hacerme daño.
Soy un ser divino, ven a adorarme.
¡Qué buena suerte amarme tanto!

Oh, el síndrome Universal,
la vida te sentó en un diván,
contando todo tipo de traumas.
Oh, podrías pensar un rato en él,
quería estudiar, recuerda como te empujaba.
Y quedó segundo, uuuhhh ...

Hoy voy a decirlo: ¡cómo me amo!
Y tú ya no puedes hacerme daño.
Soy un ser divino, ven a adorarme.
¡Qué buena suerte amarme tanto!

Di no al pánico, sin pánico, sin pánico, no al pánico.
Edipo contra Electra,
narcisismo es lo que impera.
Qué simpático, simpático, carismático, simpático.
Edipo contra Electra,
tus complejos a la hoguera, ¡ya! 

Crónica de un Schimmy hospitalizado

Un fin de semana de trabajo. Todo parte el martes en la noche, dirigiéndome a algún metro o punto de encuentro con Sergio y Luisa para ir a su casa en Las Vizcachas y preparar las cosas para un nuevo operativo. Esta vez el destino es San Francisco de Mostazal.

Miércoles, temprano en la mañana alistamos todo en el auto y partimos. Un primer operativo de esterilización en la zona sin mayores problemas. Conocí a gente muy agradable, quienes en lo posible seguirán trabajando con nosotros. Muchos pelos, gatos, perros y una urgencia.

Jueves. Día para preparar las cosas para un "maratón" de operativos en el litoral de la V región. Una junta con mi ex para ayudar a una perris de la calle y todo sigue. Cargamos el auto y viaje a Algarrobo. Luz cortada. Refrigerador con hongos. Limpiezas hasta altas horas de la noche. A dormir. 

Viernes. Isla Negra. "Mini" operativo. Más gatos que perros. 5 de la tarde: Schimmy enfermo. 6 de la tarde: Schimmy hospitalizado. Ddx: Daño neurológico por trauma. Miedos, lágrimas, angustia, ganas infinitas de volver a Santiago y estar con él. Llamados para todas partes. Sergio y Franco. Anisocoria. Sin pulso, sin dolor en mano derecha. Más miedo. Una comida con los amigos, un maravilloso atardecer cerca de la playa, como hace mucho no disfrutaba. Casa. Cama. Angustia. Dormir. 

Sábado. El Quisco. Muchos Perros, pocos gatos. Schimmy aún hospitalizado. Más miedo, pero es otro día de trabajo. Empanada de queso. Llamadas a mi ex. Visitas de mi papá. Llamadas a Santiago. Schimmy muestra leves mejorías, comienza a comer, disminuye el nivel de la anisocoria, demuestra dolor profundo. Aún no hay pulso. Mentiras. Junta con mi ex. Playa. Arena. Risas, cigarros y cervezas. Paseos por "tontodromos" -ferias artesanales-. Colectivo. Isla Negra. Alejandro Sanz. Chuapi. Madrugada de vuelta a la casa y a dormir. 

Domingo. Algarrobo. Día nublado como mi mente. Operativo sin novedad. Schimmy aún hospitalizado, sin visita aún del neurólogo. Come sólo, hace sus necesidades sin problemas. Presencia de dolor superficial, dolor profundo. Aparece pulso. Leve tranquilidad. Verduras salteadas con papas. Paseo al centro. tour de "tontodromos". Risas, bromas, láser de 10 lucas que alumbra hasta la chucha... Casa. Sopa. Lágrimas, angustia y dormir. 

Lunes. 12hr: Viaje de vuelta a Santiago. Llamada a Santiago. Finalmente lo verá el neurólogo.  Parada Maipú. Ducha, almuerzo, colectivo, hospital veterinario. 17:45: Schimmy se va de alta. Corticoides, Citoneuron. Nervio radial comprometido. Terapia física. A la casa. Trato de conservarme entera, pero no es mi mismo gato. Tengo angustia, pena. Me siento descolocada con todo lo que paso. Miedos. Muchos miedos.

Debo confesar que mi gato ya no es el mismo, sigue siendo el regalón de siempre. Come como cerdito. Toma demasiada agua -por los corticoides-. Pero en el fondo siento una pena enorme por él. Su vida cambio para siempre. Y me siento mal de no haber estado con él... 

Sólo eso.