jueves, 21 de abril de 2011

Perdonar es divino, pero que duele equivocarse

La verdad es que no tengo ganas de escribir, pero si quiero contar lo que me paso ayer -anoche-, como una forma de desahogarme y de dejar pasar el tema.

La relación con mi ex llegó a un punto en que me sentía que había sanado completamente y que podía contar con ella y ella se sentía bien cuando nos juntamos. Si bien esta en un momento triste, yo entiendo totalmente lo que es pasar por lo que ella esta viviendo en estos momentos -no se si de alguna forma de expiar ciertas culpas, pero trato de ayudarla y creo que lo hago-.

El punto es el siguiente, después de dos noches de haberme quedado en su casa, una para ayudarla a estudiar y otra para que yo pudiera estudiar con un compañero y ella terminara un seminario; me fui a mi casa.

Dormí toda la tarde despues de clases y como a las 5 me desperté porque ella quería que la acompañara a ver un departamento -no quería ir sola-. a las 5:45 me llama y me dice que mejor no, que salió muy tarde de clases y que mejor se va a ir a su casa a estudiar para una prueba de parasito que tiene mañana -hoy-. Ya, todo bien; yo seguí haciendo mis cosas, ordenando la casa -esa es otra historia- 

Como a las 7:30 me vuelve a llamar, me dice que esta mal, que se siente sola, que no pude estudiar, que tiene la cabeza en cualquier parte. Yo trato de calmarla, pero no resulta. Un llanto de dolor enorme por parte de ella, una angustía en su hablar gigante, y un no quiero estar sola de su parte, me hacen tomar la decisión de ir a acompañarla; ya que se lo que es vivir eso y sé que no termina en nada bueno. Otras llamadas por telefono, nuevamente intentando calmarla, pero sin muchos resultados. Hablo con mi mamá, le invento una historia, tomo mis cosas, le aviso que me voy y me dice que no quiere que vaya. La decisión ya estaba tomada.

Como me quede sin saldo en el telefono, cargo el telefono, me llega un mensaje en que me pide que no vaya, la llamo y le digo que voy igual, que no la voy a dejar sola.

Ya en el metro, me vuelve a llamar y me dice que va su ex ahora a verla, que la llamo y la noto triste y que va camino a su casa. Le pregunto que hago y me dice que espere a la salida del metro de su casa, que ella me va a ir a buscar -cuando terminen de hablar-.

DOS HORAS, esperando fuera del metro, tratando de llamarla de un telefono publico para que no tuviera problemas con mis llamadas y su telefono apagado. Voy a su casa. 

Error. Aun sigue con su ex, son las 11 de la noche. Toco el tiembre, pero me escondo -COMO SI ESTUVIERA HACIENDO ALGO MALO-. Sale, me dice algo que no logro entender, me voy a la plaza y espero... espero... espero....

20 minutos después me levanto y decido ir nuevamente a su casa a que me diga algo. Dando vuelta a la esquina me topo con ella y su ex.

- Estamos conversando - me dice, como si no lo supiera y no fuera obvio.
- Esperé dos horas, cagada de frio fuera del metro, te llame mil veces - le digo
- El telefono esta apagado -más obvio no puede ser...
- No te estaba llamando de mi telefono, para que no tuvieras problemas, minimo me podrías haber avisado que iba para largo, que me devolviera a mi casa... Te ahuevonai tanto con ella... no vas a cambiar... - Tenía mucha rabia - Sabes para la proxima que estes mal, evita llamarme... de verdad... no lo hagas.... y sabes algo más... JODETE...

Me voy, con mucha rabia y tristeza... después de haberla ayudado, después de tratar de subirle el animo, de acompañarla, de que sane y vea su vida de otra forma... después de muchas cosas... ninguna consideración a que estuviera esperando dos horas... siento que la cagué... que me equivoque... otra vez...

Como dice el titulo, perdonar es divino, pero que duele equivocarse... y me vuelvo a equivocar... una y otra vez... y la verdad es que no se cuando voy a parar de hacerlo...

jueves, 14 de abril de 2011

Comodidad

Cosas raras han pasado en el último tiempo. Días nublado, días soleados. Mañanas de frío intenso, tardes de intenso calor. Es como si describiera mi variabilidad de ánimos.

- Un café, por favor- espero - Gracias!-

Me siento, el lugar no es muy cómodo, pero es lo primero que encontré en el camino. Netbook encendido, cigarro en la mano, café sin azúcar en la taza -momentos perfectos-; a escribir.

Ha pasado mucho tiempo desde que no me detengo en mi nadaquehacer para escribir. Bueno en las noches lo he hecho, pero a falta de internet, permanecen en una carpeta eterna, que algún día publicaré, por hoy y un tiempo, dormirán. Bueno ¿qué ha pasado en todo este tiempo?. Muchas cosas, entre clases, operativos, paseos y demases, lo único que ha permanecido constante es mi sensación de soledad infinita. Puedo comunicarme con un sin fin de personas, mantener una grata conversación, reírme, pasarlo bien, sentirme cómoda; pero dura lo que dura: Nada.

Miro mi café, como tratando en el encontrar las respuestas a mi vacio y extraña sensación de soledad.
Las cosas en mi casa andan.... nada más. Volvió a vivir mi hermano con nosotros y somos los mismos - a excepción de mi gata- que hace 7 años atrás. Y la verdad sólo yo soy la extraña y la que esta fuera de lugar.

En el último tiempo he logrado varias cosas, sentirme cómoda y feliz de mi carrera, de lo que hago, de los logros que he tenido, de la gente que he conocido - y por motivos muy simpáticos y raros a la vez-. He logrado superar los problemas con mi ex, he encontrado tranquilidad, me he reconciliado con muchos aspectos de una Fran que sólo se dedicaba a odiar la vida. Pero aún así me sigo sintiendo sola y lo único que quiero es arrancar esa sensación de mi, siento que a mucha gente le llegaría a dar lo mismo si estoy o no, esa sensación de no sentirse esencial para nadie me consume.

Hay días en que moriría por un abrazo apretado y un te necesito.

Por hoy, solo me queda la tranquilidad de que mis pseudo-relaciones humanas están funcionando, van en buen pie y pretendo que sigan así.

martes, 8 de marzo de 2011

Love of Lesbian - La Parábola del Tonto


Ya no hay confusión
ya que el rencor duerme ahora en un desván.
Dime ...

sábado, 5 de marzo de 2011

Extraña

L'amitié après l'amour n'existe pas

Hoy me desperté cerca de mediodía, se podría decir que es prácticamente el último día en que podré disfrutar el levantarme cerca de esa hora -y realmente lo disfrute-. Desde el lunes que estoy sin pega en la clínica y me he dedicado a relajarme estos días y a estar con mi Schimmy y mi Chica.
Lo primero que hice fue llamar a mi ex para saber si me iba a poder acompañar a la fisioterapia de mi gato. Su respuesta me molesto algo, ya que nuevamente me di cuenta de que sólo ella puede contar conmigo y yo cuando necesite de alguien, la última persona con la que debería contar sería con ella. Da igual. No fue una buena forma de despertar. Fui al baño, me lave la cara, me cepille los dientes y me peine el desastre de nido de pájaros que tengo por pelo. Me hice una cola y fui a la cocina a poner el hervidor. Se venía el primer café del día. Lo serví cargado y negro. Con la taza me fui a la cama otra vez.
Prendí el televisor, dejándolo en cualquier cosa sin interés. Llamé a Daniela, una amiga que estoy conociendo hace poco, hablamos como 5 minutos y antes de terminar me dice: "algo te pasa... hoy estas como extraña"... EXTRAÑA... sí, creo que no es primera vez que me lo dicen y la verdad es que sí, me siento demasiado extraña últimamente.

No sé si me siento así por que prontamente entraré a clases y volveré a ver a mi ex todos los días -prácticamente- o por qué veré a quienes se decían amigas -y que para rematar están en la misma sección de los ramos que tomé- o por qué este año siento una presión adicional... o simplemente por qué no sé que vaya a pasar con mi gato -no sé si valdrá la pena gastar el dineral que gastaré en él... o de optar por lo sano... pero no quiero quedarme después con la sensación de que no hice nada y de "podría haber sido"...- Cuando lo pienso me doy cuenta de que son muchas razones para que una persona que estoy conociendo hace poco más de un mes me diga que me siente extraña.
Me quedé un rato pensando en Daniela. La verdad es que nos llevamos super bien, pero es raro... extraño, otra vez... cada vez que alguien logra interesarme un poco y se muestra cercana a mi o demuestra algo de preocupación, huyo lo más rápido que pueda y empiezo a tratar con puras evasivas... me escondo en la asquerosa persona que puedo llegar a ser. No es primera vez que pasa. Con Francesca pasó lo mismo -aunque nuestra relación hoy es bastante extraña-. Lo mismo pasó con Gisselle... -de ella hace mucho que no sé nada-. Es extraño. Soy extraña. 

La tarde paso y comí un trozo de melón que estaba en el refrigerador. No tenía muchas ganas de ir a ducharme aún, aunque el calor me estaba matando. Vi un par de programas, terminé de pintar mis uñas de morado. Cepille a mi gato. Cambie las sábanas de mi cama. Y cerca de las 4:30 me fui a duchar. Me encanta el agua, amo ducharme, pero odio el baño del departamento de mi mamá. 
Me vestí y fui a girar la plata para pagar la evaluación de fisioterapia de mi gato. Eran 28.000 que tendría que gastar -en un principio, ya que ahora son 160.000 por 10 sesiones-. Es todo un tema lo que se viene con mi gato, pero prefiero no pensar en nada y agotar las últimas instancias, por último si nada resulta, lo único de lo que me arrepentiré haber sido de gastar plata -que quizás en estos momentos no se de donde conseguir... pero algo se verá-. Me siento algo sola en esta batalla y siento que al fin del camino el destino será el mismo: Amputar la pata de mi gato.
Pasado las 6 me llama mi ex, le devuelvo el llamado y me dice que podrá acompañarme, que viene en camino. La verdad es que me sentí bien. No quería ir sola. No sabía a que atenerme con toda la evaluación, ya que sabía que se vería que tan probable es que recupere la movilidad. Mi mamá saldría tarde de la oficina y mis hermanos salieron, Luisa y Sergio estaban fuera de Santiago y la verdad es que cero animo de ir sola. Llegué a las 6:30 y tuve que esperar casi una hora para que me atendieran. A los minutos de haber llegado aparece mi ex. Conversamos y me aclaro que su pareja no quiere que nos juntemos nunca más. Nuevamente me sentí extraña, sigo con esa sensación que hizo que en diciembre mandáramos todo a la mierda y maldijéramos habernos conocido, siento que tengo que estar siempre que ella quiera y aguantar que me busqué cuando pelean, tener que escucharla, lamentarse, tratar de darle animo, apoyarla a que solucione sus problemas y yo me quedo en el silencio absoluto, sin nadie que escuche y me diga algo al respecto de porque soy lo extraña que soy, por qué huyo de la gente. En fin. Como dice una canción que me gusta... Yo no puedo jugar a ser Dios… Y estar cuando quieras…
Al terminar la evaluación y quedar descompensada por la cantidad de plata que aún me queda por gastar en mi gato, mi ex se fue en micro, si cruzar muchas palabras y yo me fui en taxi. Me quede con esa rara sensación de tener que estar sola... sola... sola... y de que siempre se aprovecharan de mi por que no se decir que no en muchas cosas y siempre, para todo el mundo, tengo que estar ahí... 
A la conclusión que llegué es que: L'amitié après l'amour n'existe pas



martes, 1 de marzo de 2011

Me Amo - Love of Lesbian


Mi piace andare piano, piano,
como Adriano Celentano
because like this
because like this si arriva lontano.

Cuando nací, ¡qué triunfo!,
entendí que había sido capaz de ganar
a cien millones de hombres rana en celular.
Y había nivel, y trampas.
El segundo quería estudiar alemán,
pero volcó en las caderas de mamá.

Hoy voy a decirlo: ¡cómo me amo!
Y tú ya no puedes hacerme daño.
Soy un ser divino, ven a adorarme.
¡Qué buena suerte amarme tanto!

Luego crecí, ¡qué trauma!,
percibí que aquí fuera no había piedad,
yo no iba a ser el rey del mundo.
Algo más tarde, ya un hombre,
me juré no volver a olvidarlo jamás,
fui el ganador del gran circuito de Le Mans.

Hoy voy a decirlo: ¡cómo me amo!
Y tú ya no puedes hacerme daño.
Soy un ser divino, ven a adorarme.
¡Qué buena suerte amarme tanto!

Oh, el síndrome Universal,
la vida te sentó en un diván,
contando todo tipo de traumas.
Oh, podrías pensar un rato en él,
quería estudiar, recuerda como te empujaba.
Y quedó segundo, uuuhhh ...

Hoy voy a decirlo: ¡cómo me amo!
Y tú ya no puedes hacerme daño.
Soy un ser divino, ven a adorarme.
¡Qué buena suerte amarme tanto!

Di no al pánico, sin pánico, sin pánico, no al pánico.
Edipo contra Electra,
narcisismo es lo que impera.
Qué simpático, simpático, carismático, simpático.
Edipo contra Electra,
tus complejos a la hoguera, ¡ya! 

Crónica de un Schimmy hospitalizado

Un fin de semana de trabajo. Todo parte el martes en la noche, dirigiéndome a algún metro o punto de encuentro con Sergio y Luisa para ir a su casa en Las Vizcachas y preparar las cosas para un nuevo operativo. Esta vez el destino es San Francisco de Mostazal.

Miércoles, temprano en la mañana alistamos todo en el auto y partimos. Un primer operativo de esterilización en la zona sin mayores problemas. Conocí a gente muy agradable, quienes en lo posible seguirán trabajando con nosotros. Muchos pelos, gatos, perros y una urgencia.

Jueves. Día para preparar las cosas para un "maratón" de operativos en el litoral de la V región. Una junta con mi ex para ayudar a una perris de la calle y todo sigue. Cargamos el auto y viaje a Algarrobo. Luz cortada. Refrigerador con hongos. Limpiezas hasta altas horas de la noche. A dormir. 

Viernes. Isla Negra. "Mini" operativo. Más gatos que perros. 5 de la tarde: Schimmy enfermo. 6 de la tarde: Schimmy hospitalizado. Ddx: Daño neurológico por trauma. Miedos, lágrimas, angustia, ganas infinitas de volver a Santiago y estar con él. Llamados para todas partes. Sergio y Franco. Anisocoria. Sin pulso, sin dolor en mano derecha. Más miedo. Una comida con los amigos, un maravilloso atardecer cerca de la playa, como hace mucho no disfrutaba. Casa. Cama. Angustia. Dormir. 

Sábado. El Quisco. Muchos Perros, pocos gatos. Schimmy aún hospitalizado. Más miedo, pero es otro día de trabajo. Empanada de queso. Llamadas a mi ex. Visitas de mi papá. Llamadas a Santiago. Schimmy muestra leves mejorías, comienza a comer, disminuye el nivel de la anisocoria, demuestra dolor profundo. Aún no hay pulso. Mentiras. Junta con mi ex. Playa. Arena. Risas, cigarros y cervezas. Paseos por "tontodromos" -ferias artesanales-. Colectivo. Isla Negra. Alejandro Sanz. Chuapi. Madrugada de vuelta a la casa y a dormir. 

Domingo. Algarrobo. Día nublado como mi mente. Operativo sin novedad. Schimmy aún hospitalizado, sin visita aún del neurólogo. Come sólo, hace sus necesidades sin problemas. Presencia de dolor superficial, dolor profundo. Aparece pulso. Leve tranquilidad. Verduras salteadas con papas. Paseo al centro. tour de "tontodromos". Risas, bromas, láser de 10 lucas que alumbra hasta la chucha... Casa. Sopa. Lágrimas, angustia y dormir. 

Lunes. 12hr: Viaje de vuelta a Santiago. Llamada a Santiago. Finalmente lo verá el neurólogo.  Parada Maipú. Ducha, almuerzo, colectivo, hospital veterinario. 17:45: Schimmy se va de alta. Corticoides, Citoneuron. Nervio radial comprometido. Terapia física. A la casa. Trato de conservarme entera, pero no es mi mismo gato. Tengo angustia, pena. Me siento descolocada con todo lo que paso. Miedos. Muchos miedos.

Debo confesar que mi gato ya no es el mismo, sigue siendo el regalón de siempre. Come como cerdito. Toma demasiada agua -por los corticoides-. Pero en el fondo siento una pena enorme por él. Su vida cambio para siempre. Y me siento mal de no haber estado con él... 

Sólo eso.

lunes, 21 de febrero de 2011

A Diego


Me desperté algo asustada a mitad de la noche, es la tercera vez esta semana que me pasa lo mismo. Sentí como mi corazón latía a mil, una bola de angustia subió por mi garganta atorándose antes de salir.
Esperé unos minutos sentada en la cama antes de levantarme. Miré el reloj y eran las 4:17 a.m. Fui a la cocina por un café, preparé el hervidor y fui al baño a lavarme la cara. Nuevamente no iba a poder dormir. Me miré en el espejo y nuevamente algo apretó mi pecho... Una serie de imágenes pasaron fugazmente por mi mente. Hoy... un año más.

El agua estaba lista, preparé mi café y me fui a la pieza. Otra noche que no iba a poder dormir. Prendí mi computador y revisé mis correos. La verdad que a las 4 y media de la mañana eran pocas las cosas que podía hacer. Obviamente como a esa hora no iba a encontrar con quien hablar -bueno quizás podría encontrar a Pauli, mi amiga de España, pero con sus ensayos esta sobresaturada-, de aburrida leí algunos diarios on-line, jugué un par de juegos en el computador, revise las fotos de mis amigos y finalmente me decidí por escribir. Puse el I-tunes en aleatorio y manos al teclado.

Mientras escribía varias imágenes volvieron a aparecer, eran momentos de mi infancia y adolescencia. juegos, tristezas y una persona en particular. Diego.
Si es cierto, hoy se cumple un año más desde que naciste, hoy tendrías 27, quizás hubieses terminado tu carrera, estarías trabajando como ingeniero forestal, tal vez hubieses empezado una familia como era tu sueño, tendrías a una mujer que te amará, una vida hecha, tus amigos de siempre, tu familia -que es maravillosa-, un perro -tal vez-.
Hace casi 9 años que el cáncer te alejo de todos estos sueños que alguna vez compartiste conmigo.

Últimamente he pensado mucho en la gente que he perdido, en la vida que llevo en estos momentos, en la gente que ya no esta aquí y en quienes se apartaron de mi lado o a quienes deje de ver y no pude volver a encontrar. Pero no me siento triste, no me siento sola, estoy con una tranquilidad gigante, enfocada en otras cosas, trabajando, pensando en el futuro y empezando a tomar nuevos rumbos.

Diego fue un amigo de infancia, colegio -aunque 3 cursos más-, fue mi mejor amigo, con quien compartí todos mis momentos difíciles. La separación de mis papás, los problemas en el colegio. mi sexualidad. El siempre fue un hombre luchador, magnifico, sencillo, un amigo de los que es difícil olvidar. Luchó contra su enfermedad, hizo todo, aguantó mucho dolor y continuó hasta que su cuerpo se rindió.

Te quiero mucho Diego y día a día te extraño.



domingo, 13 de febrero de 2011

Ex


En los últimos días no he tenido mucho tiempo de escribir, ni de revisar muchas cosas. Pero ahora me hago un tiempo para compartir algo que a mi parecer, el de mis amigos y cercanos, el de mi psiquiatra y mi psicóloga es algo rarísimo...

Después de Navidad con mi ex nos juramos odio eterno, nos mandamos mutuamente a la punta del cerro -eso sí, más por parte de ella hacia mi-. Para mi era algo que se veía venir, no niego que me dio mucha pena que la situación llegará a un punto en maldecir el habernos conocido, en cierta forma tenía por mi parte muchos temas que solucionar y trabajar. Y ella algunas cosas que aclarar.
Al final cada uno elije que es lo que hace, como lo hace y si quiere tener una vida a escondidas.

Hace un tiempo me comunique con ella -un par de semanas- para hacerle un comentario acerca de un amigo en común. Por teléfono hablamos 25 minutos -algo que no hago mucho... en serio-. Los temas que se tocaron pasaron del como estas, al que estas haciendo, como has estado y ella lamentándose algunas perdidas de amigos en común, con los cuales establecer lazos en la carrera y sintiéndose alejada del mundo veterinario y de su futuro profesional -situación que por mi lado he tratado de cultivar en muchos sentidos-.
Me quiero detener un poco en ese tema. Considero que cuando uno esta en pareja, tiene que respetar los espacios profesionales, cuando uno esta estudiando, la pareja tiene que entender, apoyar y fomentar la apertura a nuevos caminos dentro del área de estudio. En ese sentido, creo que mi ex se esta perdiendo oportunidades de formar lazos con gente (no me gusta la palabra "personas" la encuentro impersonal) que te permita crecer profesionalmente.

La conversación de 25 minutos fue muy extraña, ya que después de un odio firmado con sangre, sentí como si quisiera volver a acercarse para conversar conmigo y tener una relación de "conocidas" civilizada. Lo cual me parece bien, mientra aclare las cosas con su actual pareja.

Pasaron los días y me pilla en Msn en el teléfono... del como estas... pasamos al "supe que tu viaje no va" -un viaje de trabajo-. Me extraño que supiera, ya que sólo lo había publicado en un lugar y en ese lugar no tiene acceso... según lo que me dice... "tiene sus contactos"... (confieso que sentí un ligero psicopateo en esto último, ya que a mi entender, ella no quería tener lazo alguno conmigo y lo respete)

Ayer, en una junta con una amiga, recibo una llamada a la 01:01 de la mañana. Me extraño. Lo primero que pensé es que algo había pasado con alguno de los gatos o de las perras que teníamos y que quedaron con ella. Pero noooooooo!!!... del "hola, como estas", al para que llamas... "Porque estoy aburrida"... (woooooooooooooo!!!... y yo tengo cara de payaso)
No la entiendo. Pero por ahora no haré el intento en hacerlo. Yo a ella la quiero mucho, le tengo demasiado cariño por lo vivido. Hoy si hubiésemos estado juntas habrían sido 6 años viviendo juntas.
Luego le consulte donde estaba, me comentó que estaba en la casa en La Florida, cuidando a las perras, con su pareja y el hijo de ella. (yaaaaaaaa!!!) Pero que estaba en otra pieza, porque cuando se quedan con el niño, duermen en cama separadas... (de nuevo... yaaaaaaaa!!!)
Muy segura le pregunté. "Tu mina sabes que has vuelto a hablar conmigo"... NO... "Tu mina sabes que me estas llamando ahora"... NO... "Entonces empieza a hacer bien las cosas" (y después hablamos)...

El punto es que yo quiero tener una relación normal, poder sentarnos a conversar y todo, pero sin que ella sea la persona bipolar que es. Y que su pareja actual sepa y confié en ella si es que nos juntamos. Yo no tengo ningún interese amoroso con ella, ni ella conmigo. Pero solo quiero en estos momentos tranquilidad, no quiero que me llamé cuando quiera, ni que sepa que voy a estar ahí siempre -aunque así lo sea-. Quiero transparencia, pero al parecer a ella le gusta seguir haciendo las cosas mal.

En fin... sólo quería compartir esto... Son locuras de los últimos días...

lunes, 17 de enero de 2011

Próximamente -parte 1-


El sofocante olor a medicamentos que escapaba del baño, cada vez me mareaba más y más. Este olor se intensificaba cuando ya algunas pastillas se acercaban a su fecha de vencimiento y su droga desprendía un olor putrefacto y en verano.
Cuando me pongo frente al computador a escribir o a revisar mis cosas ese olor golpeaba mi nariz, ya que tenía que dejar la puerta abierta por la necesidad de que existiera una corriente de aire en mi pieza, cosa que pocas veces sucedía. Es una especie de manía el dejar las puertas y ventanas abiertas, es increíble la necesidad que tenía por sentir el aire, una brisa pequeña... pero aun así, aquel olor era realmente intenso -una mezcla de aquellos jarabes para la tos de mal gusto, vitaminas varias, antiinflamatorios, analgesicos, antidepresivos, somniferos... una lista sin fin-, la mezcla de medicamentos sin sent
idos que compraba y acumulaba, quizás solo con el fin de demostrar a los demás que seguía algún tratamiento para detener alguna obsesion, mi demencia, o como quien sabe quieran llamar a mi estado... o quizás es solo un afan más de acumular cosas estúpidas.
Comenzaba a escribir todos los dias muy temprano en la mañana, esperando encontrar las palabras exactas para continuar con mi historia que habia dejada en la noche anterior inconclusa y por la cual tengo que hacer una entrega en 1 mes más, a veces me parecia ridicula e impensable seguir con esa burda historia.
Prendia muy temprano mi computador, casi de madrugada, revisaba mi correo electronico y nunca encontraba nada nuevo, solo cadenas inutiles -c
omo si no tuvieran nada mejor que hacer, que mandarme estos correos- el punto es que nunca encontraba nada bueno en mi correo. La historia detenida del día anterior, decía lo siguiente: "... las imágenes obtenida en la ceremonia no había sido las mejores, había mucho trabajo para editar y los equipos no estaban disponibles..."

-Bah!... esto no va para ningún lado -me decía mientras buscaba entre el desorden de escritorio un cigarro perdido -habrá que seguir para cumplir la fecha de entrega.

Prendí el cigarro, me empece a columpiar y a girar ridículamente en la silla, llevaba ya dos días sin comer nada, mi estomago comenzaba a quejarse, aunque
no me molestaba aquel ruidos, pero físicamente mi cuerpo exigía algo para poder concentrarme. Baje las escaleras lentamente e intentando no meter mucho ruido, deben ser cerca de las 6:30 y no quería despertar a ninguno de los seres extraños que viven acá y pagaban por quedarse en alguna pieza, aunque solo el sentirme con compañía en esta enorme casa, me hacia sentir bien, por lo mismo algunos de estos seres extraños, no pagaban.

-Deben estar todos durmiendo -pensaba- obvio si eran la mañana de un sábado.

Entre a la cocina, hace días que no pasaba por acá. Abrí el refrigerador, busque algo que fuera de mi real agrado. Habían manzanas peludas, un pedazo de carne de algún asado, una cerveza -pero decía ser de Carlos- y finalmente un yogurth.
Opte por prepararme una taza de café y me comí un pedazo de pan duro que quedaba. Me dirigí al comedor y vi el desorden de una noche de alcohol de mis compañeros de casa. Esta casa esta hecha un real desastre. Mi abuela se tiene que estar revolcando y no debe ni siquiera imaginarse en que se transformo su herencia.

Subi con el yogurth pensando en que quizas mas tarde me darían gaas de tomarlo. Comencé a sentir frio, busqué entre el desorden de pieza algo para abrigarme y solo encontre mi chaqueta negra. Me senté frente al computador, pusé algo de música para manipular el ambiente, tal como lo he hecho todos estos últimos años. Puse algo de Sonata Arctica y empecé a escribir :"... había pasado solo un par de meses desde la última vez que se vieron, pero las sensaciones a flor de piel del primer contacto seguían ahí. Eran ahora dos extrañas, en un nuevo país, en distintos momentos, pero los sentimientos eran los mismos... ...sólo esperaban que nadie las escuchará..."

Como me gustaría verla de nuevo. Llevaba casi 12 meses sin verla, no lograba imaginar como seguía, si aún andaba con la misma chica o si andaba revolcándose con cualquiera, como lo había hecho antes. Mi vida había cambiado desde aquel día, como era posible que con solo 17 años hubiese querido optar por terminar con todo...

-No debo desviar mi concentracion... enfocate -me decía mientras tomaba un sorbo de café- solo queda un mes para la entrega...

Seguí escribiendo...

-Momento... no me gusta como esta quedando -repase lo que acababa de escribir y era un completo sinsentido.

Volví a mi cama, sin muchas ideas. Deje puesta unas pistas


de música en el ITunes y a dormir.

Continuará...

Esta historia sigue en 10 capítulos. Es algo que escribí hace mucho...

domingo, 16 de enero de 2011

Solo palabras


Últimamente han pasado muchas cosas, me voy dando cuenta día a día que me siento más sola. Pero es una soledad extraña, es algo dificil explicar con palabras... No es una soledad de no estar con alguien -porque sinceramente nunca he disfrutado mucho el contacto con la gente-. No es una soledad de la familia, tampoco de amigos, menos de pareja... Es una soledad extraña...

Sentirme sola me ha hecho pensar más en mi, en como soy... y cada vez que empiezo a pensar, no solo me duele la cabeza, sino que veo lo disfuncional que puedo llegar a ser y de las miles de cosas que en dos segundos llegan a pasar por mi cabeza...

En una pagina para conocer chicas tengo una extraña descripcion... Se lee lo siguiente:

Soy únicamente rara, volada por naturaleza, tengo muy buena memoria para cosas que no quiero tener memoria...
Estudio una carrera del mundo científico, pero en el alma soy una humanista frustrada.
Me gusta la literatura y le dedicó un importante tiempo del día a leer o escribir cualquier cosa, me gusta la naturaleza, estar tirada en el pasto un par de horas, descansar de todo, no escuchar a nada ni a nadie, disfrutar de "un momento para mi". Amo a los animales... sobretodo los Gatos... Me fascinan... Me gusta la música y el cine.
Disfruto demasiado del café y la buena compañía.

Es raro leer como uno se presenta al mundo... lo mismo me pasa cuando repaso lo que he escrito... De un tiempo a la fecha he encontrado muchos de mis escritos de tiempos de colegio, tardes de soledad y momentos de alegría. A la conclusión que puedo llegar después de haber leído un par de cosas, es que sigo siendo la misma mente siniestra, disfuncional, sin sentido, excesivamente pensante y de agobiante crueldad hacia una imagen mía que solo en las palabras se esconde.

Puedo decir muchas veces que entre las brisas nocturnas o del atardecer, siento una ligera sensación de tranquilidad que me da miedo... es una extraña tranquilidad... Respiro profundamente y es como si cayera en los brazos de la mujer más protectora del mundo, es como si me dejará acariciar una suavidad indescriptible... Es una sensación que entre mis estados de cordura, ansiedad, mis estados de euforia y depresión... es un punto medio que me hace aterrizar.

Pero a pesar de todo lo que puedo llegar a sentir, a leer, a escribir, a pensar, y vivir...

Me gusta mi vida en estos momentos.
Disfruto de mi tiempo.

sábado, 15 de enero de 2011

Los seis días - INFINITAMENTE (Videoclip oficial)


La mañana está .. soleada 
por tus besos que .. se escapan. 
Busco tus rincones .. serenos
para esconder .. mis dedos. 

Interminación,
tus piernas de infinitamente piel,
las ondas de tu voz,
tus átomos de unión .. 
está todo en extinción. 
 Ya casi estoy.

Los seis días - Te odio


Te odio .. porque siempre sigues .. siempre sigues .. siempre sigues .. siempre sigues ahí. 

Love of Lesbian - Allí donde solíamos gritar


Me encanta esta canción... El grupo es genial =)

martes, 11 de enero de 2011

Pelos, patas y gatos


No escribir sobre lo que me gusta, es como dejar pasar todo por delante sin mirar.

Como empezó mi amor con los gatos, la verdad es un poco extraño decidir cuando y como, creo que es algo de siempre, pero que solo hace poco pude conocer.
Cuando niña solo tenía perros, gallinas y ovejas. Los perros de mi vida de niñez fueron "Mac", un hermoso Setter Irlandes y "Zach" un Doberman marrón precioso, creo que desde ese entonces los perros marrones se han transformado en mi debilidad, los veo y me transmiten un millón de cosas con su mirada. Las gallinas era todo un tema, eran horas de diversión en el gallineros, hasta que nos picaran -nos, porque iba con mi hermano-, las ovejas fue mucho despues, pero marcaron cosas en mi.
Pelos, muchos pelos. Patas, muchas patas distintas.

Y los gatos.

La primera historia de gatos partió con los gatos de mis amigas y amigos, cuando iba a sus casas no podía evitar hacerles cariño varios minutos, buscarlos y esperar a que me devolvieran el cariño con un ronroneo. El ronroneo es todo un cuento, debo confesar que es el mejor tranquilizante del mundo, en mis momentos de extrema rabia y euforia, son esos "prrrrrrr" eternos que me calman, me hacen aterrizar y trasladarme a un mundo donde todo es tranquilidad, todo es suave, delicioso y unico; puedo volver a respirar, relajarme y dejarme llevar; sin dudas mi mejor antidepresivo.
Mi primer gato fue todo un hito, era un tabby marrón, medio timido, muy inteligente, silencioso, intruso, maniatico de las bolsas. Es en este punto cuando empiezo a sacar cuenta de la cantidad de gatos que han pasado por mi vida, me han marcado en ciertos puntos -fuera de los respectivos rasguños- y veo que mi memoria funciona muy bien para tenerlos en mi, por que todos tuvieron algo muy especial.
Luego al vivir con mi ex, ella tenía un gato, "Spike", un peludito bicolor azul, con leucemia, pero una personalidad silenciosa única. El "Ekaitz" -que en vasco significa tormenta- fue nuestro primer gato juntas. La lista crece, aparece el Itzal -sombra en vasco-, "Oroitz" -recuerdo-, "Mia", "Tito", "Tita", "Gato", la lista crece con muchos temporales que encontraron hogar. "Fulub" una hermosa gatita calicó que apareció en mi vida con días de haber nacido, criada día y noche se convirtió en toda una belleza, que un día opto por la libertad. Hay muchos la verdad, podría escribir acerca de todos, pero para que aburrir.
Hoy tengo a "Schimmy" un tabby marron de 7 kilos, con una personalidad deliciosa, regalón cuando el quiere y muy independiente y mi "Chica" una gatita tabby rojo, con una mirada única, unos ojos miel únicos, que me entiende cuando quiero estar sola y me acompaña en mis momentos de desconsuelo, me tranquiliza con su eterno ronroneo y con sus infinitas ganas de recibir cariño.
Siento que en ningún punto de mi vida podría abandonarlos, o dejar de estar sin gatos. Se han transformado en mi punto de control, su sola presencia hace que todo valga la pena y que las cosas que en un principio se ven de lo más complicadas, se transformen en nada frente a un ronroneo o un maullido.
Por eso confieso que lo mejor son los pelos, las patas y los gatos

jueves, 21 de abril de 2011

Perdonar es divino, pero que duele equivocarse

La verdad es que no tengo ganas de escribir, pero si quiero contar lo que me paso ayer -anoche-, como una forma de desahogarme y de dejar pasar el tema.

La relación con mi ex llegó a un punto en que me sentía que había sanado completamente y que podía contar con ella y ella se sentía bien cuando nos juntamos. Si bien esta en un momento triste, yo entiendo totalmente lo que es pasar por lo que ella esta viviendo en estos momentos -no se si de alguna forma de expiar ciertas culpas, pero trato de ayudarla y creo que lo hago-.

El punto es el siguiente, después de dos noches de haberme quedado en su casa, una para ayudarla a estudiar y otra para que yo pudiera estudiar con un compañero y ella terminara un seminario; me fui a mi casa.

Dormí toda la tarde despues de clases y como a las 5 me desperté porque ella quería que la acompañara a ver un departamento -no quería ir sola-. a las 5:45 me llama y me dice que mejor no, que salió muy tarde de clases y que mejor se va a ir a su casa a estudiar para una prueba de parasito que tiene mañana -hoy-. Ya, todo bien; yo seguí haciendo mis cosas, ordenando la casa -esa es otra historia- 

Como a las 7:30 me vuelve a llamar, me dice que esta mal, que se siente sola, que no pude estudiar, que tiene la cabeza en cualquier parte. Yo trato de calmarla, pero no resulta. Un llanto de dolor enorme por parte de ella, una angustía en su hablar gigante, y un no quiero estar sola de su parte, me hacen tomar la decisión de ir a acompañarla; ya que se lo que es vivir eso y sé que no termina en nada bueno. Otras llamadas por telefono, nuevamente intentando calmarla, pero sin muchos resultados. Hablo con mi mamá, le invento una historia, tomo mis cosas, le aviso que me voy y me dice que no quiere que vaya. La decisión ya estaba tomada.

Como me quede sin saldo en el telefono, cargo el telefono, me llega un mensaje en que me pide que no vaya, la llamo y le digo que voy igual, que no la voy a dejar sola.

Ya en el metro, me vuelve a llamar y me dice que va su ex ahora a verla, que la llamo y la noto triste y que va camino a su casa. Le pregunto que hago y me dice que espere a la salida del metro de su casa, que ella me va a ir a buscar -cuando terminen de hablar-.

DOS HORAS, esperando fuera del metro, tratando de llamarla de un telefono publico para que no tuviera problemas con mis llamadas y su telefono apagado. Voy a su casa. 

Error. Aun sigue con su ex, son las 11 de la noche. Toco el tiembre, pero me escondo -COMO SI ESTUVIERA HACIENDO ALGO MALO-. Sale, me dice algo que no logro entender, me voy a la plaza y espero... espero... espero....

20 minutos después me levanto y decido ir nuevamente a su casa a que me diga algo. Dando vuelta a la esquina me topo con ella y su ex.

- Estamos conversando - me dice, como si no lo supiera y no fuera obvio.
- Esperé dos horas, cagada de frio fuera del metro, te llame mil veces - le digo
- El telefono esta apagado -más obvio no puede ser...
- No te estaba llamando de mi telefono, para que no tuvieras problemas, minimo me podrías haber avisado que iba para largo, que me devolviera a mi casa... Te ahuevonai tanto con ella... no vas a cambiar... - Tenía mucha rabia - Sabes para la proxima que estes mal, evita llamarme... de verdad... no lo hagas.... y sabes algo más... JODETE...

Me voy, con mucha rabia y tristeza... después de haberla ayudado, después de tratar de subirle el animo, de acompañarla, de que sane y vea su vida de otra forma... después de muchas cosas... ninguna consideración a que estuviera esperando dos horas... siento que la cagué... que me equivoque... otra vez...

Como dice el titulo, perdonar es divino, pero que duele equivocarse... y me vuelvo a equivocar... una y otra vez... y la verdad es que no se cuando voy a parar de hacerlo...

jueves, 14 de abril de 2011

Comodidad

Cosas raras han pasado en el último tiempo. Días nublado, días soleados. Mañanas de frío intenso, tardes de intenso calor. Es como si describiera mi variabilidad de ánimos.

- Un café, por favor- espero - Gracias!-

Me siento, el lugar no es muy cómodo, pero es lo primero que encontré en el camino. Netbook encendido, cigarro en la mano, café sin azúcar en la taza -momentos perfectos-; a escribir.

Ha pasado mucho tiempo desde que no me detengo en mi nadaquehacer para escribir. Bueno en las noches lo he hecho, pero a falta de internet, permanecen en una carpeta eterna, que algún día publicaré, por hoy y un tiempo, dormirán. Bueno ¿qué ha pasado en todo este tiempo?. Muchas cosas, entre clases, operativos, paseos y demases, lo único que ha permanecido constante es mi sensación de soledad infinita. Puedo comunicarme con un sin fin de personas, mantener una grata conversación, reírme, pasarlo bien, sentirme cómoda; pero dura lo que dura: Nada.

Miro mi café, como tratando en el encontrar las respuestas a mi vacio y extraña sensación de soledad.
Las cosas en mi casa andan.... nada más. Volvió a vivir mi hermano con nosotros y somos los mismos - a excepción de mi gata- que hace 7 años atrás. Y la verdad sólo yo soy la extraña y la que esta fuera de lugar.

En el último tiempo he logrado varias cosas, sentirme cómoda y feliz de mi carrera, de lo que hago, de los logros que he tenido, de la gente que he conocido - y por motivos muy simpáticos y raros a la vez-. He logrado superar los problemas con mi ex, he encontrado tranquilidad, me he reconciliado con muchos aspectos de una Fran que sólo se dedicaba a odiar la vida. Pero aún así me sigo sintiendo sola y lo único que quiero es arrancar esa sensación de mi, siento que a mucha gente le llegaría a dar lo mismo si estoy o no, esa sensación de no sentirse esencial para nadie me consume.

Hay días en que moriría por un abrazo apretado y un te necesito.

Por hoy, solo me queda la tranquilidad de que mis pseudo-relaciones humanas están funcionando, van en buen pie y pretendo que sigan así.

martes, 8 de marzo de 2011

Love of Lesbian - La Parábola del Tonto


Ya no hay confusión
ya que el rencor duerme ahora en un desván.
Dime ...

sábado, 5 de marzo de 2011

Extraña

L'amitié après l'amour n'existe pas

Hoy me desperté cerca de mediodía, se podría decir que es prácticamente el último día en que podré disfrutar el levantarme cerca de esa hora -y realmente lo disfrute-. Desde el lunes que estoy sin pega en la clínica y me he dedicado a relajarme estos días y a estar con mi Schimmy y mi Chica.
Lo primero que hice fue llamar a mi ex para saber si me iba a poder acompañar a la fisioterapia de mi gato. Su respuesta me molesto algo, ya que nuevamente me di cuenta de que sólo ella puede contar conmigo y yo cuando necesite de alguien, la última persona con la que debería contar sería con ella. Da igual. No fue una buena forma de despertar. Fui al baño, me lave la cara, me cepille los dientes y me peine el desastre de nido de pájaros que tengo por pelo. Me hice una cola y fui a la cocina a poner el hervidor. Se venía el primer café del día. Lo serví cargado y negro. Con la taza me fui a la cama otra vez.
Prendí el televisor, dejándolo en cualquier cosa sin interés. Llamé a Daniela, una amiga que estoy conociendo hace poco, hablamos como 5 minutos y antes de terminar me dice: "algo te pasa... hoy estas como extraña"... EXTRAÑA... sí, creo que no es primera vez que me lo dicen y la verdad es que sí, me siento demasiado extraña últimamente.

No sé si me siento así por que prontamente entraré a clases y volveré a ver a mi ex todos los días -prácticamente- o por qué veré a quienes se decían amigas -y que para rematar están en la misma sección de los ramos que tomé- o por qué este año siento una presión adicional... o simplemente por qué no sé que vaya a pasar con mi gato -no sé si valdrá la pena gastar el dineral que gastaré en él... o de optar por lo sano... pero no quiero quedarme después con la sensación de que no hice nada y de "podría haber sido"...- Cuando lo pienso me doy cuenta de que son muchas razones para que una persona que estoy conociendo hace poco más de un mes me diga que me siente extraña.
Me quedé un rato pensando en Daniela. La verdad es que nos llevamos super bien, pero es raro... extraño, otra vez... cada vez que alguien logra interesarme un poco y se muestra cercana a mi o demuestra algo de preocupación, huyo lo más rápido que pueda y empiezo a tratar con puras evasivas... me escondo en la asquerosa persona que puedo llegar a ser. No es primera vez que pasa. Con Francesca pasó lo mismo -aunque nuestra relación hoy es bastante extraña-. Lo mismo pasó con Gisselle... -de ella hace mucho que no sé nada-. Es extraño. Soy extraña. 

La tarde paso y comí un trozo de melón que estaba en el refrigerador. No tenía muchas ganas de ir a ducharme aún, aunque el calor me estaba matando. Vi un par de programas, terminé de pintar mis uñas de morado. Cepille a mi gato. Cambie las sábanas de mi cama. Y cerca de las 4:30 me fui a duchar. Me encanta el agua, amo ducharme, pero odio el baño del departamento de mi mamá. 
Me vestí y fui a girar la plata para pagar la evaluación de fisioterapia de mi gato. Eran 28.000 que tendría que gastar -en un principio, ya que ahora son 160.000 por 10 sesiones-. Es todo un tema lo que se viene con mi gato, pero prefiero no pensar en nada y agotar las últimas instancias, por último si nada resulta, lo único de lo que me arrepentiré haber sido de gastar plata -que quizás en estos momentos no se de donde conseguir... pero algo se verá-. Me siento algo sola en esta batalla y siento que al fin del camino el destino será el mismo: Amputar la pata de mi gato.
Pasado las 6 me llama mi ex, le devuelvo el llamado y me dice que podrá acompañarme, que viene en camino. La verdad es que me sentí bien. No quería ir sola. No sabía a que atenerme con toda la evaluación, ya que sabía que se vería que tan probable es que recupere la movilidad. Mi mamá saldría tarde de la oficina y mis hermanos salieron, Luisa y Sergio estaban fuera de Santiago y la verdad es que cero animo de ir sola. Llegué a las 6:30 y tuve que esperar casi una hora para que me atendieran. A los minutos de haber llegado aparece mi ex. Conversamos y me aclaro que su pareja no quiere que nos juntemos nunca más. Nuevamente me sentí extraña, sigo con esa sensación que hizo que en diciembre mandáramos todo a la mierda y maldijéramos habernos conocido, siento que tengo que estar siempre que ella quiera y aguantar que me busqué cuando pelean, tener que escucharla, lamentarse, tratar de darle animo, apoyarla a que solucione sus problemas y yo me quedo en el silencio absoluto, sin nadie que escuche y me diga algo al respecto de porque soy lo extraña que soy, por qué huyo de la gente. En fin. Como dice una canción que me gusta... Yo no puedo jugar a ser Dios… Y estar cuando quieras…
Al terminar la evaluación y quedar descompensada por la cantidad de plata que aún me queda por gastar en mi gato, mi ex se fue en micro, si cruzar muchas palabras y yo me fui en taxi. Me quede con esa rara sensación de tener que estar sola... sola... sola... y de que siempre se aprovecharan de mi por que no se decir que no en muchas cosas y siempre, para todo el mundo, tengo que estar ahí... 
A la conclusión que llegué es que: L'amitié après l'amour n'existe pas



martes, 1 de marzo de 2011

Me Amo - Love of Lesbian


Mi piace andare piano, piano,
como Adriano Celentano
because like this
because like this si arriva lontano.

Cuando nací, ¡qué triunfo!,
entendí que había sido capaz de ganar
a cien millones de hombres rana en celular.
Y había nivel, y trampas.
El segundo quería estudiar alemán,
pero volcó en las caderas de mamá.

Hoy voy a decirlo: ¡cómo me amo!
Y tú ya no puedes hacerme daño.
Soy un ser divino, ven a adorarme.
¡Qué buena suerte amarme tanto!

Luego crecí, ¡qué trauma!,
percibí que aquí fuera no había piedad,
yo no iba a ser el rey del mundo.
Algo más tarde, ya un hombre,
me juré no volver a olvidarlo jamás,
fui el ganador del gran circuito de Le Mans.

Hoy voy a decirlo: ¡cómo me amo!
Y tú ya no puedes hacerme daño.
Soy un ser divino, ven a adorarme.
¡Qué buena suerte amarme tanto!

Oh, el síndrome Universal,
la vida te sentó en un diván,
contando todo tipo de traumas.
Oh, podrías pensar un rato en él,
quería estudiar, recuerda como te empujaba.
Y quedó segundo, uuuhhh ...

Hoy voy a decirlo: ¡cómo me amo!
Y tú ya no puedes hacerme daño.
Soy un ser divino, ven a adorarme.
¡Qué buena suerte amarme tanto!

Di no al pánico, sin pánico, sin pánico, no al pánico.
Edipo contra Electra,
narcisismo es lo que impera.
Qué simpático, simpático, carismático, simpático.
Edipo contra Electra,
tus complejos a la hoguera, ¡ya! 

Crónica de un Schimmy hospitalizado

Un fin de semana de trabajo. Todo parte el martes en la noche, dirigiéndome a algún metro o punto de encuentro con Sergio y Luisa para ir a su casa en Las Vizcachas y preparar las cosas para un nuevo operativo. Esta vez el destino es San Francisco de Mostazal.

Miércoles, temprano en la mañana alistamos todo en el auto y partimos. Un primer operativo de esterilización en la zona sin mayores problemas. Conocí a gente muy agradable, quienes en lo posible seguirán trabajando con nosotros. Muchos pelos, gatos, perros y una urgencia.

Jueves. Día para preparar las cosas para un "maratón" de operativos en el litoral de la V región. Una junta con mi ex para ayudar a una perris de la calle y todo sigue. Cargamos el auto y viaje a Algarrobo. Luz cortada. Refrigerador con hongos. Limpiezas hasta altas horas de la noche. A dormir. 

Viernes. Isla Negra. "Mini" operativo. Más gatos que perros. 5 de la tarde: Schimmy enfermo. 6 de la tarde: Schimmy hospitalizado. Ddx: Daño neurológico por trauma. Miedos, lágrimas, angustia, ganas infinitas de volver a Santiago y estar con él. Llamados para todas partes. Sergio y Franco. Anisocoria. Sin pulso, sin dolor en mano derecha. Más miedo. Una comida con los amigos, un maravilloso atardecer cerca de la playa, como hace mucho no disfrutaba. Casa. Cama. Angustia. Dormir. 

Sábado. El Quisco. Muchos Perros, pocos gatos. Schimmy aún hospitalizado. Más miedo, pero es otro día de trabajo. Empanada de queso. Llamadas a mi ex. Visitas de mi papá. Llamadas a Santiago. Schimmy muestra leves mejorías, comienza a comer, disminuye el nivel de la anisocoria, demuestra dolor profundo. Aún no hay pulso. Mentiras. Junta con mi ex. Playa. Arena. Risas, cigarros y cervezas. Paseos por "tontodromos" -ferias artesanales-. Colectivo. Isla Negra. Alejandro Sanz. Chuapi. Madrugada de vuelta a la casa y a dormir. 

Domingo. Algarrobo. Día nublado como mi mente. Operativo sin novedad. Schimmy aún hospitalizado, sin visita aún del neurólogo. Come sólo, hace sus necesidades sin problemas. Presencia de dolor superficial, dolor profundo. Aparece pulso. Leve tranquilidad. Verduras salteadas con papas. Paseo al centro. tour de "tontodromos". Risas, bromas, láser de 10 lucas que alumbra hasta la chucha... Casa. Sopa. Lágrimas, angustia y dormir. 

Lunes. 12hr: Viaje de vuelta a Santiago. Llamada a Santiago. Finalmente lo verá el neurólogo.  Parada Maipú. Ducha, almuerzo, colectivo, hospital veterinario. 17:45: Schimmy se va de alta. Corticoides, Citoneuron. Nervio radial comprometido. Terapia física. A la casa. Trato de conservarme entera, pero no es mi mismo gato. Tengo angustia, pena. Me siento descolocada con todo lo que paso. Miedos. Muchos miedos.

Debo confesar que mi gato ya no es el mismo, sigue siendo el regalón de siempre. Come como cerdito. Toma demasiada agua -por los corticoides-. Pero en el fondo siento una pena enorme por él. Su vida cambio para siempre. Y me siento mal de no haber estado con él... 

Sólo eso.

lunes, 21 de febrero de 2011

A Diego


Me desperté algo asustada a mitad de la noche, es la tercera vez esta semana que me pasa lo mismo. Sentí como mi corazón latía a mil, una bola de angustia subió por mi garganta atorándose antes de salir.
Esperé unos minutos sentada en la cama antes de levantarme. Miré el reloj y eran las 4:17 a.m. Fui a la cocina por un café, preparé el hervidor y fui al baño a lavarme la cara. Nuevamente no iba a poder dormir. Me miré en el espejo y nuevamente algo apretó mi pecho... Una serie de imágenes pasaron fugazmente por mi mente. Hoy... un año más.

El agua estaba lista, preparé mi café y me fui a la pieza. Otra noche que no iba a poder dormir. Prendí mi computador y revisé mis correos. La verdad que a las 4 y media de la mañana eran pocas las cosas que podía hacer. Obviamente como a esa hora no iba a encontrar con quien hablar -bueno quizás podría encontrar a Pauli, mi amiga de España, pero con sus ensayos esta sobresaturada-, de aburrida leí algunos diarios on-line, jugué un par de juegos en el computador, revise las fotos de mis amigos y finalmente me decidí por escribir. Puse el I-tunes en aleatorio y manos al teclado.

Mientras escribía varias imágenes volvieron a aparecer, eran momentos de mi infancia y adolescencia. juegos, tristezas y una persona en particular. Diego.
Si es cierto, hoy se cumple un año más desde que naciste, hoy tendrías 27, quizás hubieses terminado tu carrera, estarías trabajando como ingeniero forestal, tal vez hubieses empezado una familia como era tu sueño, tendrías a una mujer que te amará, una vida hecha, tus amigos de siempre, tu familia -que es maravillosa-, un perro -tal vez-.
Hace casi 9 años que el cáncer te alejo de todos estos sueños que alguna vez compartiste conmigo.

Últimamente he pensado mucho en la gente que he perdido, en la vida que llevo en estos momentos, en la gente que ya no esta aquí y en quienes se apartaron de mi lado o a quienes deje de ver y no pude volver a encontrar. Pero no me siento triste, no me siento sola, estoy con una tranquilidad gigante, enfocada en otras cosas, trabajando, pensando en el futuro y empezando a tomar nuevos rumbos.

Diego fue un amigo de infancia, colegio -aunque 3 cursos más-, fue mi mejor amigo, con quien compartí todos mis momentos difíciles. La separación de mis papás, los problemas en el colegio. mi sexualidad. El siempre fue un hombre luchador, magnifico, sencillo, un amigo de los que es difícil olvidar. Luchó contra su enfermedad, hizo todo, aguantó mucho dolor y continuó hasta que su cuerpo se rindió.

Te quiero mucho Diego y día a día te extraño.



domingo, 13 de febrero de 2011

Ex


En los últimos días no he tenido mucho tiempo de escribir, ni de revisar muchas cosas. Pero ahora me hago un tiempo para compartir algo que a mi parecer, el de mis amigos y cercanos, el de mi psiquiatra y mi psicóloga es algo rarísimo...

Después de Navidad con mi ex nos juramos odio eterno, nos mandamos mutuamente a la punta del cerro -eso sí, más por parte de ella hacia mi-. Para mi era algo que se veía venir, no niego que me dio mucha pena que la situación llegará a un punto en maldecir el habernos conocido, en cierta forma tenía por mi parte muchos temas que solucionar y trabajar. Y ella algunas cosas que aclarar.
Al final cada uno elije que es lo que hace, como lo hace y si quiere tener una vida a escondidas.

Hace un tiempo me comunique con ella -un par de semanas- para hacerle un comentario acerca de un amigo en común. Por teléfono hablamos 25 minutos -algo que no hago mucho... en serio-. Los temas que se tocaron pasaron del como estas, al que estas haciendo, como has estado y ella lamentándose algunas perdidas de amigos en común, con los cuales establecer lazos en la carrera y sintiéndose alejada del mundo veterinario y de su futuro profesional -situación que por mi lado he tratado de cultivar en muchos sentidos-.
Me quiero detener un poco en ese tema. Considero que cuando uno esta en pareja, tiene que respetar los espacios profesionales, cuando uno esta estudiando, la pareja tiene que entender, apoyar y fomentar la apertura a nuevos caminos dentro del área de estudio. En ese sentido, creo que mi ex se esta perdiendo oportunidades de formar lazos con gente (no me gusta la palabra "personas" la encuentro impersonal) que te permita crecer profesionalmente.

La conversación de 25 minutos fue muy extraña, ya que después de un odio firmado con sangre, sentí como si quisiera volver a acercarse para conversar conmigo y tener una relación de "conocidas" civilizada. Lo cual me parece bien, mientra aclare las cosas con su actual pareja.

Pasaron los días y me pilla en Msn en el teléfono... del como estas... pasamos al "supe que tu viaje no va" -un viaje de trabajo-. Me extraño que supiera, ya que sólo lo había publicado en un lugar y en ese lugar no tiene acceso... según lo que me dice... "tiene sus contactos"... (confieso que sentí un ligero psicopateo en esto último, ya que a mi entender, ella no quería tener lazo alguno conmigo y lo respete)

Ayer, en una junta con una amiga, recibo una llamada a la 01:01 de la mañana. Me extraño. Lo primero que pensé es que algo había pasado con alguno de los gatos o de las perras que teníamos y que quedaron con ella. Pero noooooooo!!!... del "hola, como estas", al para que llamas... "Porque estoy aburrida"... (woooooooooooooo!!!... y yo tengo cara de payaso)
No la entiendo. Pero por ahora no haré el intento en hacerlo. Yo a ella la quiero mucho, le tengo demasiado cariño por lo vivido. Hoy si hubiésemos estado juntas habrían sido 6 años viviendo juntas.
Luego le consulte donde estaba, me comentó que estaba en la casa en La Florida, cuidando a las perras, con su pareja y el hijo de ella. (yaaaaaaaa!!!) Pero que estaba en otra pieza, porque cuando se quedan con el niño, duermen en cama separadas... (de nuevo... yaaaaaaaa!!!)
Muy segura le pregunté. "Tu mina sabes que has vuelto a hablar conmigo"... NO... "Tu mina sabes que me estas llamando ahora"... NO... "Entonces empieza a hacer bien las cosas" (y después hablamos)...

El punto es que yo quiero tener una relación normal, poder sentarnos a conversar y todo, pero sin que ella sea la persona bipolar que es. Y que su pareja actual sepa y confié en ella si es que nos juntamos. Yo no tengo ningún interese amoroso con ella, ni ella conmigo. Pero solo quiero en estos momentos tranquilidad, no quiero que me llamé cuando quiera, ni que sepa que voy a estar ahí siempre -aunque así lo sea-. Quiero transparencia, pero al parecer a ella le gusta seguir haciendo las cosas mal.

En fin... sólo quería compartir esto... Son locuras de los últimos días...

lunes, 17 de enero de 2011

Próximamente -parte 1-


El sofocante olor a medicamentos que escapaba del baño, cada vez me mareaba más y más. Este olor se intensificaba cuando ya algunas pastillas se acercaban a su fecha de vencimiento y su droga desprendía un olor putrefacto y en verano.
Cuando me pongo frente al computador a escribir o a revisar mis cosas ese olor golpeaba mi nariz, ya que tenía que dejar la puerta abierta por la necesidad de que existiera una corriente de aire en mi pieza, cosa que pocas veces sucedía. Es una especie de manía el dejar las puertas y ventanas abiertas, es increíble la necesidad que tenía por sentir el aire, una brisa pequeña... pero aun así, aquel olor era realmente intenso -una mezcla de aquellos jarabes para la tos de mal gusto, vitaminas varias, antiinflamatorios, analgesicos, antidepresivos, somniferos... una lista sin fin-, la mezcla de medicamentos sin sent
idos que compraba y acumulaba, quizás solo con el fin de demostrar a los demás que seguía algún tratamiento para detener alguna obsesion, mi demencia, o como quien sabe quieran llamar a mi estado... o quizás es solo un afan más de acumular cosas estúpidas.
Comenzaba a escribir todos los dias muy temprano en la mañana, esperando encontrar las palabras exactas para continuar con mi historia que habia dejada en la noche anterior inconclusa y por la cual tengo que hacer una entrega en 1 mes más, a veces me parecia ridicula e impensable seguir con esa burda historia.
Prendia muy temprano mi computador, casi de madrugada, revisaba mi correo electronico y nunca encontraba nada nuevo, solo cadenas inutiles -c
omo si no tuvieran nada mejor que hacer, que mandarme estos correos- el punto es que nunca encontraba nada bueno en mi correo. La historia detenida del día anterior, decía lo siguiente: "... las imágenes obtenida en la ceremonia no había sido las mejores, había mucho trabajo para editar y los equipos no estaban disponibles..."

-Bah!... esto no va para ningún lado -me decía mientras buscaba entre el desorden de escritorio un cigarro perdido -habrá que seguir para cumplir la fecha de entrega.

Prendí el cigarro, me empece a columpiar y a girar ridículamente en la silla, llevaba ya dos días sin comer nada, mi estomago comenzaba a quejarse, aunque
no me molestaba aquel ruidos, pero físicamente mi cuerpo exigía algo para poder concentrarme. Baje las escaleras lentamente e intentando no meter mucho ruido, deben ser cerca de las 6:30 y no quería despertar a ninguno de los seres extraños que viven acá y pagaban por quedarse en alguna pieza, aunque solo el sentirme con compañía en esta enorme casa, me hacia sentir bien, por lo mismo algunos de estos seres extraños, no pagaban.

-Deben estar todos durmiendo -pensaba- obvio si eran la mañana de un sábado.

Entre a la cocina, hace días que no pasaba por acá. Abrí el refrigerador, busque algo que fuera de mi real agrado. Habían manzanas peludas, un pedazo de carne de algún asado, una cerveza -pero decía ser de Carlos- y finalmente un yogurth.
Opte por prepararme una taza de café y me comí un pedazo de pan duro que quedaba. Me dirigí al comedor y vi el desorden de una noche de alcohol de mis compañeros de casa. Esta casa esta hecha un real desastre. Mi abuela se tiene que estar revolcando y no debe ni siquiera imaginarse en que se transformo su herencia.

Subi con el yogurth pensando en que quizas mas tarde me darían gaas de tomarlo. Comencé a sentir frio, busqué entre el desorden de pieza algo para abrigarme y solo encontre mi chaqueta negra. Me senté frente al computador, pusé algo de música para manipular el ambiente, tal como lo he hecho todos estos últimos años. Puse algo de Sonata Arctica y empecé a escribir :"... había pasado solo un par de meses desde la última vez que se vieron, pero las sensaciones a flor de piel del primer contacto seguían ahí. Eran ahora dos extrañas, en un nuevo país, en distintos momentos, pero los sentimientos eran los mismos... ...sólo esperaban que nadie las escuchará..."

Como me gustaría verla de nuevo. Llevaba casi 12 meses sin verla, no lograba imaginar como seguía, si aún andaba con la misma chica o si andaba revolcándose con cualquiera, como lo había hecho antes. Mi vida había cambiado desde aquel día, como era posible que con solo 17 años hubiese querido optar por terminar con todo...

-No debo desviar mi concentracion... enfocate -me decía mientras tomaba un sorbo de café- solo queda un mes para la entrega...

Seguí escribiendo...

-Momento... no me gusta como esta quedando -repase lo que acababa de escribir y era un completo sinsentido.

Volví a mi cama, sin muchas ideas. Deje puesta unas pistas


de música en el ITunes y a dormir.

Continuará...

Esta historia sigue en 10 capítulos. Es algo que escribí hace mucho...

domingo, 16 de enero de 2011

Solo palabras


Últimamente han pasado muchas cosas, me voy dando cuenta día a día que me siento más sola. Pero es una soledad extraña, es algo dificil explicar con palabras... No es una soledad de no estar con alguien -porque sinceramente nunca he disfrutado mucho el contacto con la gente-. No es una soledad de la familia, tampoco de amigos, menos de pareja... Es una soledad extraña...

Sentirme sola me ha hecho pensar más en mi, en como soy... y cada vez que empiezo a pensar, no solo me duele la cabeza, sino que veo lo disfuncional que puedo llegar a ser y de las miles de cosas que en dos segundos llegan a pasar por mi cabeza...

En una pagina para conocer chicas tengo una extraña descripcion... Se lee lo siguiente:

Soy únicamente rara, volada por naturaleza, tengo muy buena memoria para cosas que no quiero tener memoria...
Estudio una carrera del mundo científico, pero en el alma soy una humanista frustrada.
Me gusta la literatura y le dedicó un importante tiempo del día a leer o escribir cualquier cosa, me gusta la naturaleza, estar tirada en el pasto un par de horas, descansar de todo, no escuchar a nada ni a nadie, disfrutar de "un momento para mi". Amo a los animales... sobretodo los Gatos... Me fascinan... Me gusta la música y el cine.
Disfruto demasiado del café y la buena compañía.

Es raro leer como uno se presenta al mundo... lo mismo me pasa cuando repaso lo que he escrito... De un tiempo a la fecha he encontrado muchos de mis escritos de tiempos de colegio, tardes de soledad y momentos de alegría. A la conclusión que puedo llegar después de haber leído un par de cosas, es que sigo siendo la misma mente siniestra, disfuncional, sin sentido, excesivamente pensante y de agobiante crueldad hacia una imagen mía que solo en las palabras se esconde.

Puedo decir muchas veces que entre las brisas nocturnas o del atardecer, siento una ligera sensación de tranquilidad que me da miedo... es una extraña tranquilidad... Respiro profundamente y es como si cayera en los brazos de la mujer más protectora del mundo, es como si me dejará acariciar una suavidad indescriptible... Es una sensación que entre mis estados de cordura, ansiedad, mis estados de euforia y depresión... es un punto medio que me hace aterrizar.

Pero a pesar de todo lo que puedo llegar a sentir, a leer, a escribir, a pensar, y vivir...

Me gusta mi vida en estos momentos.
Disfruto de mi tiempo.

sábado, 15 de enero de 2011

Los seis días - INFINITAMENTE (Videoclip oficial)


La mañana está .. soleada 
por tus besos que .. se escapan. 
Busco tus rincones .. serenos
para esconder .. mis dedos. 

Interminación,
tus piernas de infinitamente piel,
las ondas de tu voz,
tus átomos de unión .. 
está todo en extinción. 
 Ya casi estoy.

Los seis días - Te odio


Te odio .. porque siempre sigues .. siempre sigues .. siempre sigues .. siempre sigues ahí. 

Love of Lesbian - Allí donde solíamos gritar


Me encanta esta canción... El grupo es genial =)

martes, 11 de enero de 2011

Pelos, patas y gatos


No escribir sobre lo que me gusta, es como dejar pasar todo por delante sin mirar.

Como empezó mi amor con los gatos, la verdad es un poco extraño decidir cuando y como, creo que es algo de siempre, pero que solo hace poco pude conocer.
Cuando niña solo tenía perros, gallinas y ovejas. Los perros de mi vida de niñez fueron "Mac", un hermoso Setter Irlandes y "Zach" un Doberman marrón precioso, creo que desde ese entonces los perros marrones se han transformado en mi debilidad, los veo y me transmiten un millón de cosas con su mirada. Las gallinas era todo un tema, eran horas de diversión en el gallineros, hasta que nos picaran -nos, porque iba con mi hermano-, las ovejas fue mucho despues, pero marcaron cosas en mi.
Pelos, muchos pelos. Patas, muchas patas distintas.

Y los gatos.

La primera historia de gatos partió con los gatos de mis amigas y amigos, cuando iba a sus casas no podía evitar hacerles cariño varios minutos, buscarlos y esperar a que me devolvieran el cariño con un ronroneo. El ronroneo es todo un cuento, debo confesar que es el mejor tranquilizante del mundo, en mis momentos de extrema rabia y euforia, son esos "prrrrrrr" eternos que me calman, me hacen aterrizar y trasladarme a un mundo donde todo es tranquilidad, todo es suave, delicioso y unico; puedo volver a respirar, relajarme y dejarme llevar; sin dudas mi mejor antidepresivo.
Mi primer gato fue todo un hito, era un tabby marrón, medio timido, muy inteligente, silencioso, intruso, maniatico de las bolsas. Es en este punto cuando empiezo a sacar cuenta de la cantidad de gatos que han pasado por mi vida, me han marcado en ciertos puntos -fuera de los respectivos rasguños- y veo que mi memoria funciona muy bien para tenerlos en mi, por que todos tuvieron algo muy especial.
Luego al vivir con mi ex, ella tenía un gato, "Spike", un peludito bicolor azul, con leucemia, pero una personalidad silenciosa única. El "Ekaitz" -que en vasco significa tormenta- fue nuestro primer gato juntas. La lista crece, aparece el Itzal -sombra en vasco-, "Oroitz" -recuerdo-, "Mia", "Tito", "Tita", "Gato", la lista crece con muchos temporales que encontraron hogar. "Fulub" una hermosa gatita calicó que apareció en mi vida con días de haber nacido, criada día y noche se convirtió en toda una belleza, que un día opto por la libertad. Hay muchos la verdad, podría escribir acerca de todos, pero para que aburrir.
Hoy tengo a "Schimmy" un tabby marron de 7 kilos, con una personalidad deliciosa, regalón cuando el quiere y muy independiente y mi "Chica" una gatita tabby rojo, con una mirada única, unos ojos miel únicos, que me entiende cuando quiero estar sola y me acompaña en mis momentos de desconsuelo, me tranquiliza con su eterno ronroneo y con sus infinitas ganas de recibir cariño.
Siento que en ningún punto de mi vida podría abandonarlos, o dejar de estar sin gatos. Se han transformado en mi punto de control, su sola presencia hace que todo valga la pena y que las cosas que en un principio se ven de lo más complicadas, se transformen en nada frente a un ronroneo o un maullido.
Por eso confieso que lo mejor son los pelos, las patas y los gatos